Miguel Braceli

La práctica de Miguel Braceli (Venezuela, 1984) explora temas sociopolíticos, trabajando en la intersección del arte y la arquitectura; performance, media e instalación; prácticas sociales y educación. Formado como arquitecto, la práctica artística de Braceli surgió como una respuesta resistente a la crisis social, política y económica que enfrentaba Venezuela. Se convirtió en artista colaborando con sus estudiantes de arquitectura en proyectos experimentales en el espacio público; buscando acercar la educación a los contextos reales, para aprender y actuar sobre ellos y descubriendo que la educación es una forma de práctica artística en sí misma. Basado en el aprendizaje y la creación colectiva, sus obras a gran escala efectivamente crean, respuestas comunitarias desde, dentro y para contextos específicos. Braceli trabaja dentro de espacios liminales, explorando las relaciones entre el cuerpo y el territorio, entre el ser individual y el cuerpo colectivo, entre el orden y la contingencia de proyectos abiertos en el campo expandido. Desde vastas geografías hasta conexiones más íntimas a escala humana, muchas de sus obras exploran nociones de fronteras, migración, identidad, derechos humanos y conflictos geopolíticos. Apuntan a la equidad como materia para construir y se esfuerzan por reconfigurar esa sustancia en conexiones sociales significativas. En 2021 cofundó LA ESCUELA___, una plataforma dirigida por artistas para el aprendizaje radical y la creación colectiva en espacios públicos. El organismo busca llevar el aprendizaje y el arte a todos al asociarse con universidades, instituciones y comunidades para crear proyectos formativos (proyectos formativos) en espacios públicos en toda América Latina.

Miguel Braceli (Venezuela, 1984) explores social-political issues working at the intersection of art and architecture; performance, media and installation; social practices and education. Trained as an architect, Braceli’s art practice emerged as a resilient response to the social, political and economic crisis that faced Venezuela. He became an artist by collaborating with his architecture students in experimental projects in public space; seeking to bring education closer to real contexts, so as to learn and act on them and discovering that education is an art practice form itself. Based on collective learning and making, his large-scale works effectively create communal responses from within and for specific contexts. Braceli works within liminal spaces, exploring relationships between the body and the territory, between the individual being and the collective body, between order and contingency of open-ended projects in the expanded field. From vast geographies to more intimate connections on a human scale, many of his works explore notions of borders, migration, identity, human rights and geopolitical conflicts. They aim for equity as matter to build and strive to reconfigure that substance into meaningful social connections. In 2021 co-founded LA ESCUELA___ , an artist-run platform for collective learning for radical learning and collective making in public spaces. La Escuela seeks to bring learning and art to everyone by partnering with universities, institutions, and communities to create formative projects (proyectos formativos) in public spaces throughout Latin America.

Karina Aguilera Skvirsky es una artista multidisciplinar que trabaja principalmente con fotografía, video y performance. Actualmente es Profesora Asociada de Arte en Lafayette College, Easton, PA. De manera regular trabaja en exposiciones individuales y colectivas, ha participado en bienales como en la de Cuenca, comisariada por Dan Cameron (2016) o en la de São Paulo (2010). Ha sido beneficiaria de numerosas residencias y becas. Actualmente está produciendo"Cómo construir un muro y otras ruinas" gracias a la beca obtenida en 2019 por parte de Creative Capital. Su obra se puede ver en ferias como, ARCO Madrid, NADA Miami o PArc Lima, a donde acude regularmente con las galerías que la representan. Su obra forma parte de importantes colecciones como la Urbes Mutantes, el Whitney Museum of American Art, el SFMOMA el Art Institute of Chicago, así como numerosas colecciones privadas

Karina Aguilera Skvirsky is a multidisciplinary artist that works mainly with photographs, video, and performance. She is currently Associate Professor in the Department of Art at Lafayette College, Easton PA. She frequently works in solo and group exhibitions, she has participated in various biennials including the Cuenca Biennial, which was curated by Dan Cameron in 2016, and the São Paulo Biennial in 2010. She has participated in numerous residencies and received multiple grants. Currently, she is in the production phase of a new project, “How to buld a wall and other ruin” that is being funded by a 2019 Creative Capital grant. Her work can be seen in fairs such as ARCO Madrid, NADA Miami or PARC Lima, where she regularly exhibits with the galleries that represent her. Her work is included in the following collections: Urbes Muatantes, The Whitney Museum of American Art, the SFMOMA, the Art Institute of Chicago, as well as numerous private collections.

Para The Backroom, Miguel Braceli presenta una colección de videos inéditos de su trabajo Área de 2014, que ocurrió en la Plaza Caracas, Venezuela. A través de una convocatoria abierta, Área reunió a un grupo diverso de participantes todos interesados en una causa común: crear un espacio único compartido, un "área", en el corazón del distrito gubernamental de Caracas en el Centro Simón Bolívar. El performance se basó en desafiar la polarización de los discursos políticos presentados e incentivados por el gobierno. Área apuntó a derrotar las narrativas de poder del gobierno a través de las acciones colectivas de la gente. La polarización es una división utilizada y creada por los gobiernos dictatoriales como estrategia política para la perpetuación del poder; este proyecto pretende desdibujar estas fronteras a través de la construcción de un gesto colectivo como acto político.

Los clips inéditos archivados del performance Área hablan de temas como el azar, la contingencia y la naturaleza de la obra como producción de sitio específico. Los transeúntes observan y son testigos de cómo la gente se organiza bajo la lluvia torrencial, un factor imprevisto que de hecho no impidió que nadie abandonara la función. El público que optó por participar en el proyecto resistió estos desafíos. Mientras la lluvia caía sobre la plaza, la fila de artistas se convirtió en un obstáculo para otros que solo querían cruzar el espacio para llegar a alguna parte. En otro clip, observamos a un niño pequeño que comienza a correr de un lado a otro de la línea, en un momento corre con el mismo Braceli. Este niño juguetón, que se encontró ese día al azar con el performance, se convirtió en su auténtico líder.

Los videos rebozan cotidianidad pero también hacen hincapié en la acción misma y el objetivo del performance; crear colectividad a través del contacto humano. Una presencia clave en las fotografías es el busto escultórico de Simón Bolívar en la plaza, que se encuentra en lo alto y durante décadas la ha presidido. La cámara capta la escultura desde atrás. Bolívar es a la vez un espectador pasivo y un testigo del performance, pero igualmente es un civil más, que mantiene el anonimato ya que su rostro no es visible. Él, como muchos otros, solo está observando. El cronómetro señala la hora del día en que ocurrió el performance, haciendo eco de las afinidades efímeras y temporales de Área. El proceso de este trabajo se centra en su temporalidad, una acción sostenida en el marco de una sola hora. A diferencia de la producción de otras artes vivas que se prestan al desarrollo de dibujos, esquemas, planos y otros métodos de visualización, esta obra solo se resuelve y se realiza en el momento en que acontece. Desde sus inicios hasta su creación, Área sólo se enfrenta y se mantiene en el presente.

For The Backroom, Miguel Braceli presents a collection of unedited videos from his 2014 work Area, which took place at the Plaza Caracas, Venezuela. Through an open call, Area brought together a diverse group of participants all interested in a common cause: to create a shared single space, an "area," at the heart of the governmental district of Caracas at the Centro Simón Bolívar. The performance was grounded in challenging the polarization of political discourses put forth and incensitized by the government. Area aimed to defeat government-power narratives from people's collective actions. Political polarization is a division used and created by dictatorial governments as a political strategy for the perpetuation of power, this project aimed to blur these borders through the construction of a collective gesture as a political act.

The archived unedited clips from the performance of Area speak directly to themes of chance, contingency and the site-specific nature of the work. Passersby observe and witness as people come to organize under the pouring rain, an unforeseen factor that indeed did not detain anyone from leaving the performance. A local audience who chose to participate in the project resisted these obstacles. As rain fell on the plaza, the line of performers became an obstacle to others who just wanted to cross the space to get somewhere. In another clip, we observe a small child that begins to run up and down the line, at one point he races back and forth with Braceli himself. This playful child, who randomly came upon the performance that day, actually ended up as a leader of the performance. The videos are textured with everydayness, but also reinvigorate the very action and goal of the performance, to create human contact and collectivity. A key presence in the photographs is the sculptural bust of Simon Bolivar in the plaza, which sits high and for decades has presided high over the plaza. The camera catches the sculpture from behind. Bolivar is both a passive viewer and witness to the performance but equally just another civilian, maintaining anonymity as his face is not visible. He, like many others, is just observing. The time-stamp points to the time of day when the performance took place, echoing the ephemeral and temporal affinities of Area. The process of this work is temporal, an action kept within the hour mark of when it started. Unlike the production of other live art that lends itself to drawings, planning and other visualization methods, this work only resolves and realizes itself at the moment of its making. From its inception to its creation, Area only contends and deals with the present.

Area, 2014
Participatory performance.
Plaza Caracas, Venezuela.
Documentation: Andrea Hernández, Diego González, Julio Mesa, Kathiana Cardona, Yuri Liscano, Luis Montero, Tiago Loureiro, Manuel Villagómez, Saúl Yuncoxar.

Área, 2014
Performance partivipativo.
Plaza Caracas, Venezuela.
Documentación: Andrea Hernández, Diego González, Julio Mesa, Kathiana Cardona, Yuri Liscano, Luis Montero, Tiago Loureiro, Manuel Villagómez, Saúl Yuncoxar.

El Museo Tamayo e Independent Curators International se asocian para albergar la versión digital de The Backroom. Iniciado en 2005 por Magalí Arriola, Kate Fowle y Renaud Proch, este proyecto de investigación originalmente presencial reúne vídeos, música, fotografías, impresos efímeros, anécdotas o cualquier acción o artefacto que alimente la práctica artística de creadores de diversas disciplinas.

En su edición digital iniciada a partir de 2020, a los curadores participantes se les invita a presentar aquello que hay detrás de la práctica de tres artistas. The Backroom es un espacio para descubrir y navegar el arte desde una perspectiva que, más allá del objeto o artefacto artístico, revela cómo el arte es un ejercicio continuo y relacional. Objetos de deseo, archivos personales, bibliotecas, investigación artística, música, rutinas, películas, biografías; el arte está en un intercambio permanente con el mundo que lo rodea.

The Museo Tamayo and Independent Curators International partner to host the digital version of The Backroom. Initiated in 2005 by Magalí Arriola, Kate Fowle, and Renaud Proch, this originally in-person research project gathers videos, music, photographs, printed ephemera, anecdotes, or any action or artifact that feeds the artistic practice of creators from diverse disciplines.

In its digital edition launched in 2020, the participating curators are invited to present what lies behind the practice of three artists. The Backroom is a space to discover and navigate art from a perspective that, beyond the artistic object or artifact, reveals how art is an ongoing and relational exercise. Objects of desire, personal archives, libraries, artistic research, music, routines, films, biographies; art is in a permanent exchange with the world around it.